China, Japón y Rusia, aplauden a Trump... ¡hasta con las orejas!.

Las medidas proteccionistas de Trump, están obligando a México a salir al mercado mundial con la mayor prontitud posible. Su dependencia comercial con EEUU, era peligrosa ya que el 78% de las exportaciones eran a su vecino del norte. Y como dice el dicho, nunca hay que poner todos los huevos en la misma canasta.
China hace tiempo que viene ganando mercado en Sudamérica, principalmente con los "países de gobiernos rebeldes", pero ahora ya visualiza mas oportunidades, incluso con gobernantes más pro-EEUU como los de Argentina, Brasil, Perú, etc.etc.
Ahora también Japón esta negociando con México la instalación de empresas niponas y en estos días visitan ese país, cien empresarios del sol naciente.
En estos días treinta empresas chinas estudian con el gobierno mexicano su instalación en ese país.
Por su parte, Rusia, mueve sus hilos con mas secretismo, pero también quiere aprovechar el evidente y esperado alejamiento de muchos países latinoaméricanos, que están atentos a otros desprecios semejantes.
Las medidas y palabras de Trump, están cambiando el panorama, que bien aprovechado, podría mejorar la dependencia y la comercialización de los productos, y, al mismo tiempo que cierra puertas con USA, las abre a otros mercados.
Hace unos días, el diario argentino Clarín (de clara tendencia oficialista) titulaba con preocupación que EEUU cerraba de modo unilateral la exportación de limones argentinos a EEUU. Al mismo tiempo el mensaje proteccionista de D. Trump, dejaba anticuadas las promesas electorales de Macri que pregonaban el fin del proteccionismo de Cristina Fernandez y que en su gobierno habría una "inserción en el mundo", que para el gobierno significa "pegados a USA". Muchos gobiernos deberían replantearse ahora si seguirán complacientes las órdenes de EEUU, o abrirse de verdad, a otras opciones, sin la necesidad de estar atentos a que los poderosos "amigos" del norte, le guste o no.
Sin embargo está pasando desarpercibido el hecho de que Trump, rompa varios tratados y desee implementar los convenios bilaterales, que como nos cuenta la historia, nunca fueron en igualdad de condiciones. No es una locura pensar que volverán las viejas técnicas de negociación, solo es imaginar que cualquier país débil, aceptará, si o si, las imposiciones del imperio... de lo contrario si un gobierno no acepta, lo derriban y ponen a otro que sea un títere pro-USA.
Latinoamérica tiene una gran oportunidad de unirse, de una vez por todas, en políticas comunes, de lo contrario, seguirán a la merced de cualquier capricho de Trump.
La historia no da tantas oportunidades de abrir los ojos, pero esta, puede ser una de ellas, porque ahora fueron los limones argentinos y las exportaciones mexicanas...¿y que puede ser mañana?