No es digno de una democracia.

 


 "La gente está cansada de tanta inseguridad".... "hay que matar un millón de argentinos", "queremos la pena de muerte", "esto está lleno de vagos", "trabajo sobra... lo que no hay es ganas de trabajar". Estas frases hechas son comunes no solo en Argentina sino en toda sociedad que piensa poco y se conforma con soluciones rápidas y facilonas. Tal vez, porque a través de los siglos no se tomaron el trabajo de pensar con más profundidad, ni dudar que a lo mejor es eso, exactamente, lo que los gobernantes quieren y necesitan que piensen y repitan.
Cuando un pueblo pide la pena de muerte, o que se reprima con violencia los hechos delictivos, los gobiernos extremistas lo ven con buenos ojos, pues eso les permite, una supuesta solución, no de fondo, pero si de imagen. Por lo tanto solo tienen que ordenar a sus policías (cuando no también a sus militares) ¡metan bala!, el segundo paso es comprar, apretar, acorralar o silenciar, a todos los medios de comunicación que hagan notar este suceso y premiar, aupar, dar publicidad gubernamental u otros favores a todos los otros medios que aplaudan la "limpieza general". La aplicación de la pena de muerte no soluciona los males de la sociedad y además se corre el riesgo de aplicar una pena que no admite corrección ante un error de la justicia. Sin entrar en discusiones éticas, la pena de muerte da pie a interesados abusos y al mismo tiempo el gobierno gana puntos ante una sociedad que viendo algunos ejemplos y no enterándose a través de los medios de los hechos delictivos, cree vivir más segura... no por algo la utilizan las dictaduras.
Hace unos días en la Argentina, un policía persiguió a un ladrón y en plena calle le descerrajó un tiro por la espalda. Aunque no lo crea el presidente Mauricio Macri recibió a este policía en la casa de gobierno y lo mostró ante el país como un héroe. Este suceso lamentable es indigno de una democracia y el presidente de un país no puede caer tan bajo, pero... supuestamente, la mayoría de la sociedad está conforme, según el asesor presidencial Duran Barbas. Triste papel y un notable retroceso para un gobierno que aparenta ser democrático, pero que le está tomando el gusto a eso de matar por la espalda, como hicieron no hace mucho con un par de indígenas en el sur del país.
https://www.youtube.com/watch?v=0e65ZEwi_8U
Cuando se premia a un policía que mata a un hombre ya abatido, se lo convierte en juez y héroe y ya se imaginará usted el riesgo que corre una sociedad cuando cualquier policía, (sin ponernos a discutir sus limitaciones personales, que pueden ser muchas).
Lamentable suceso, la actuación de un policía, pero lo del presidente Macri, no es digno de un presidente democrático.
José Trillo Arán.