Mariano Rajoy está haciendo lo imposible para ver si unos días antes de las elecciones llega medianamente limpio a esa contienda. Anunció rebajas en la factura de la luz, devolvió una parte de lo que les había birlado a los funcionarios públicos, prometió y prometió y algunas hizo, por pocos meses, claro. Después de las elecciones todo el tenderete se caerá y al que le toque gobernar ¡ya se apañará!, si por la ayuda incalculable y comprometida de Ciudadanos seguiría gobernando, el pretexto que se usará (incluso aunque ganan otros) ya esta hace meses guardado en el cajón de los pendientes, y es que se le está debiendo a la patronal de Bruselas, la nueva tanda de ajustes (o sea recortes) que el gobierno, con la complacencia de la UE, está retrasando. Don Mariano no aspira a mucho mas que no sea que en los últimos meses haya cierta tranquilidad y que la mala memoria de los votantes se olviden de tanta corrupción y recortes. ¡Pero no tiene paz!. Ahora nos enteramos que el ministro del Interior recibe en su despacho a Rodrigo Rato, un tipo de dudoso pasado que se suaviza utilizando palabras como "presunto" imputado y que el barrio solemos decir ¡un chorizo de los grandes! o ¡ladrón de alto standing! con el "presunto" de ley o sin el. Cuando no es la Púnica es la Gürtel, cuando no otros dos ministros que se van de vacaciones pagas por cuenta de uno de los tantos amigovios que da la corrupción. Pero aun así en España nunca se sabe, la gente quiere creer que todo va bien y no duda en observar que en el último año las predicciones de crecimiento se cambiaron seis veces, siempre al alza, claro. Si seguimos creciendo así no nos alcanzarán los gráficos y la flecha que va hacía arriba se quedará sin papel para registrar este fabuloso presente y el futuro pleno que nos espera. Para completar la mentira ya se usan términos como "creceremos mas que Alemania", que nos recuerda a aquel otro que decía "construimos mas que Alemania, Francia e Inglaterra juntas"... y así nos fue. Ahora el gobierno y los medios están expandiendo la burbuja de "España va bien" y aunque muchos sabemos que es una burbuja con vida semestral, muchos lo creerán, la gente siempre quiere creer a los mensajes optimistas y aunque todo le vaya mal a los planes de don Mariano, incluso así, puede volver a gobernar...
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