martes, 21 de abril de 2015

Que sigan muriendo...¡que está todo bien...!

   "Que Dios le de salud amigo... pero a mi que no falte trabajo", decía el funebrero.
Este es el mismo pensamiento que Europa, USA, China y otros países poderosos piensan y desean para el continente africano, y aunque suene cruel la realidad nos dice que su pensamiento es "qué todo está bien como está". Si detuvieran las guerras ¿qué haríamos con la producción de armas?...también hay que pensar en los fabricantes de armas, en los puestos de trabajo que generan, en las jugosas comisiones que se llevan los traficantes y/o políticos que intervienen. Si detenemos las muertes provocadas por ejércitos ilegales que sostienen la esclavitud y el contrabando en zonas donde se extrae el coltam ¿como fabricariamos móviles y ordenadores baratos?... también hay que pensar en las pobres multinacionales y en la competencia del mercado, que no todo es "¡ala! a detener las muertes". No señor hay cosas que son lógicas y convenientes, Europa, USA, Israel y otros, deben evitar que un gobierno elegido por el pueblo de un país sea contrario a sus intereses y si los egipcios votan en mayoría a los Hermanos Musulmanes ayudamos a los militares desconformes o ambiciosos y le montamos un golpe de estado aunque esto cause miles de muertes, que bien merecido se lo tienen por votar a esos enemigos del mundo libre y siempre es mejor un buen golpe de estado "legal" que el deseo de las mayorías por muy democrático que sea. Ya va siendo hora que entendamos que el mundo es así y está todo ordenado y no hay que ser muy brillante para entender que sino hubiera chorizos no sería necesario la policía, si la gente no se saliera de la ley ¿qué haríamos con el sistema judicial? Los muertos son necesarios para dar vida a los vivos, vida y mucho dinero a los vivos inmorales que no cuentan personas muertas sino el dinero que producen. Es bueno que vayamos entendiendo que esto de estar lamentando muertes en el Mediterraneo, en las guerras, en las matanzas que producen los narcos, es una pérdida de tiempo y una hipocresía que no nos genera riqueza alguna y que apenas si nos sirve para tener algo de que hablar.
   Hace unos días escuchaba un discurso del ex- presidente uruguayo J. Mujica donde pedía un "gran plan Marshall para el mundo", donde nos recordaba que se gastan dos millones de dólares por minuto en gasto armamentistico, que nunca tuvimos mas recursos que ahora para construir sociedades mas justas, y claro, se me cayeron un par de lágrimas pensando en que tienen toda la razón y soñé por unos minutos que se podía hacer realidad. Con voluntad política todo se podría y el mundo sería tan diferente que no lo conoceríamos, pero claro, haría falta lideres mundiales con una altura moral que es dificil de encontrar o incluso soñar. El viejo mandatario fue castigado con insultos como "soñador", "utópico", "infantil", "demagogo", y tantos otros califictivos para desvirtuarlo y que al mismo tiempo los miserables de vuelo bajo no se sientan tan señalados. En el caso de los muertos en el Mediterráneo ni siquiera somos inteligentes, tomando como inteligencia nuestro egoísmo ancestral, somos tan torpes que ni siquiera le encontramos el lado positivo a la llegada de "refugiados", aunque nos guste llamarlos "emigrantes ilegales" para apaciguar nuestra conciencia, pero ni siquiera desde el egoísmo actuamos con sensatez, ya que vivimos en un continente de casi quinientos millones de personas donde hay "demasiados viejos", porque no queremos hijos, dan mucho trabajo y cuestan mucho dinero, dinero que necesitamos para vivir mejor, sin darnos cuenta, ni siquiera economicamente pensamos bien ya que esta gente que llega suelen ser humanos fuertes, sanos y de un buen nivel cultural (cosa que se oculta), además de gente valiente ya que atreverse a semejante travesía no es cosa menor. Los europeos no los quieren ver llegar, tienen miedo, miedo y desprecio, miedo fomentado durante siglos de concientización y justificación de todas las barbaridades que hicimos en África, necesitábamos justificar matanzas y expolios y era más conveniente que la sociedad creyera que "esos salvajes" no merecían nada mejor, lo que dio vía libre a las atrocidades, incluso el racismo se sigue utilizando hoy, el menosprecio de ese color de piel, no es un hecho casual y cuanto mas se rebaje lo negro mas se valoriza lo blanco. "Suerte negra" tiene ese continente, ni siquiera pensamos que esa gente nos puede salvar demograficamente hablando, que con su llegada pueden colaborar con las cuotas necesarias para mantener el estado del bienestar, y que son mano de obra valiosa para poder seguir cobrando nuestras jubilaciones, ni siquiera somos egoistamente inteligentes. Por lo tanto dejemos de vivir el día de la marmota una y otra vez, y hacer que nos duelen esos muertos, sigamos acercándonos a los políticos vulgares y teatreros que salen a la calle a manifestarse por cuatro muertos en Francia y se oculten detrás de los escritorios de sus despachos ante miles de muertos "extraños" y que apretados por el periodismo digan cosas políticamente correctas, pero que en el fondo de sus almas mediocres piensen...¡todo está bien!.

José Trillo Aran.


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