En todos los órdenes de la vida, en algún momento concreto hay un bajón, una perdida de interés tan grande que a veces nos provoca un replanteo total, nos obliga a buscar cambios, a conocer o vivir otras realidades, o simplemente alejarse un tiempo. Las razones pueden ser muchas aunque en mi caso es una sola, una enfermedad que intento que nadie se contagie, desde hace unos días mi cuerpo no soporta serenamente un ¡tremendo ataque de asco!, algo que puede ser altamente contagioso.
Los lectores habituales de este blog, ya notaron que estoy escribiendo menos y que solo me pongo a seleccionar trabajos de otras personas que estén mas o menos en linea con mi pensamiento. Por eso escribo esto a modo de disculpa, no estoy entregando lo mejor de mi porque el asco me quita fuerzas y me deja como un trapo viejo, como una alpargata mojada y bígotuda, está enfermedad tiene la rara potestad de crear grandes altibajos en el carácter, y por momentos, y sin previo aviso, me sube tanto la adrenalina que tengo necesidad de hacer uso de una furia descontrolada y caer en radicalismos que seguramente no solucionarían nada, pero que a uno lo pueden dejar "muy a gustito", al menos por unas horas. Si ya no puedo soportar y comprender la ignorancia de los menos favorecidos, si no encuentro las palabras para convencer y educar, si no puedo aceptar las cobardías que amalgama a las masas, sino puedo soportar las traiciones de los políticos, sino puedo entender que todo esto es parte de la condición humana y por lo tanto yo soy parte de ello, entonces es que debo retirarme por un tiempo hasta que el asco se vaya diluyendo poco a poco por acción del paso del tiempo o que mi cuerpo, afortunadamente tan sano y fuerte, lo vaya eliminando. El asco es una enfermedad muy seria, que como un cáncer, se come las células de la ecuanimidad, desgasta la serenidad de la visión humana, el buen humor, el optimismo y si no se para a tiempo se ramifica en unas metástasis que alimenta la rabia que mata la pareja y la familia, y estas dos cosas, que son el regalo que me dio la vida, no quiero arriesgarlas.
Si me curo, o al menos alcanzo una mejoría aceptable, vuelvo a escribir, pero soy consciente que este logro será difícil, ¡el asco es altamente adictivo!, y para colmo de males, yo que no tengo Dios lucharé solo contra él.
Gracias a todos.
Creado por José Manuel Barreal San Martín.
Los poderes públicos que nos gobiernan, el gobierno del PP con el FMI y la OCDE, bajo la doctrina de la primacía de lo privado sobre lo público y el dominio del dios mercado, nos están diciendo e imponiendo que las actuales pensiones son inviables. Sí, ya sé, también el PSOE no lo hizo nada bien, por no decir fatal, con este tema, pero ahora toca hablar de lo que se está haciendo y de la que se avecina
Es decir, con la orden explícita de la Troika capitalista y escudándose en un informe de “expertos”, del que no es descabellado dudar de su imparcialidad, todo lo contrario, ya que la mayoría de ellos son, eso sí, expertos en la ideología neoliberal, se está fraguando el mayor y más grave atentado contra el bienestar de los españoles, uno más de los hasta ahora ejecutados.
Para ello, para justificar tal atraco a los bolsillos de los ocho millones de pensionistas, el gobierno lo quiere disfrazar de científico y así, con una fórmula endiablada donde las haya, introduce variables como la esperanza de vida, el número de cotizantes y pensionistas, la cuantía media, las previsiones de ingresos y gastos del sistema. No obstante, por mucho que empleen la justificación de la ciencia, con esas y otras añagazas, lo que es, y no otra cosa, una decisión política al igual que la elección de las personas supuestamente expertas. A buen seguro que otras, también elegidas, tendrían criterios distintos y no tan drásticos.
El pensamiento único neoliberal del gobierno del PP y de la Unión Europea nos dicen que el futuro sistema de pensiones es inviable y en consecuencia nos plantean lo que ellos denominan reformas estructurales, que en el caso de las pensiones pasan, entre otras, por las siguientes medidas: alargamiento de la edad de jubilación a los 67 años para el 2027. Este periodo lo van a acortar no llegando a 2027 sino hacerlo ya en 2020; así como pasar de los actuales quince años de cotización para hacer la base de la jubilación a hacerlo con los últimos 25 años. Otra medida será dificultar las jubilaciones anticipadas. Esto supone anualmente un coste a la Seguridad Social de unos 10.000 millones de euros. Con las medidas recientemente tomadas se ahorran unos 5.000 millones de euros. Así, hasta algunas más.
Todas estas reformas, del Partido Popular, en el tema de las pensiones, llevan el mismo camino: que haya menos pensionistas y que estas sean cada día de menor valor.
La pregunta a tal actuación gubernamental es ¿qué pretenden con estas medidas? La respuesta es obvia, empobrecer el sistema público de pensiones para favorecer las pensiones privadas; ya que estas suponen un gran beneficio al sistema financiero y asegurador. Un bocado muy apetitoso que el BBVA, Santander, Caixa y otras entidades financieras no pueden dejar pasar sin hincarle el diente. Su idea es reducir las pensiones públicas para que quienes puedan ahorrar se vean en la obligación de entrar en las pensiones privadas y que la banca disponga de ese pastel. No están en juego las pensiones, sino los beneficios de la banca. Es así de sencillo y de claro.
Si no se desea que la situación produzca en la sociedad española, agotada e indignada de sufrir medidas correctoras brutales e injustas, actuaciones de consecuencias imprevisibles sería bueno tener en cuenta que la Constitución española en su artículo 50 dice: los poderes públicos deberán también garantizar, “mediante pensiones adecuadas y periódicamente actualizadas, la suficiencia económica a los ciudadanos durante la tercera edad.”
Es posible que lo que va a ocurrir, está ocurriendo, con las pensiones interese solo a los directamente implicados y que el resto, los más jóvenes, no lo vean aún; es posible… Sin embargo es uno de los mayores ataques a la sociedad, pues quiebra algo que tendría que ser el norte de una sociedad justa e igualitaria: el pacto fundamental de solidaridad intergeneracional. Nace, así, el y la pensionista como nuevo paria social. Solo, mera vida física. Terrible.
Nota.- A fecha 21 de octubre de este año 2013
El presidente de la Comisión de Economía de la patronal, José Luis Feito, en rueda de prensa para presentar un análisis de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2014, junto al director general del IEE, Joaquín Trigo, y la coordinadora de su Servicio de Estudios, Almudena Semur, apuesta por aumentar la edad de jubilación hasta los 70 años y establecer un periodo mínimo de cotización de 40 años para poder cobrar el 100% de la pensión.