El día de los inocentes...

Leo varios periódicos, los titulares son: el rey cobra un sueldo anual de 292000 euros al año.
En el diario El país, en el mismo artículo dice que el rey asignó en 2011, a la reina y a la princesa Leticia (se supone que en total para las dos) la suma de 375000 euros,¿¿?? algo no me encaja. En el diario Público el periodista Eduardo Ekaizer, habla de 8.430.000 de euros al año, como costo anual de la casa real. ABC coincide en la suma de 292000 euros y algunas monedas.
A los españoles como yo, (que son cada día más) no le interesan como se dibujan las cuentas, si como sueldos, si como gastos de representación, o como mantenimiento de toda una estructura edilicia, de seguridad, de personal, de guardias civiles, de custodios, de inteligencia, seguridad o personal de limpieza.
Lo que nos duele es mantener a esta gente, aunque no estemos de acuerdo con su permanencia en una España que intenta ser moderna, las monarquías son instituciones del pasado, totalmente anacrónicas, es más, es una burla hacia las pretensiones de igualdad que se lucha por imponer.
Pero lo mas denigrante es ver, como se juega con las palabras, el rey dijo "que no había que personalizar" que los periodistas tienen ese manía, cuando un día antes en el discurso "dio a entender que la justicia era igual para todos", lo que sonó a una clara alusión al chanchullo donde está presuntamente implicado su yerno. O sea, hoy digo A y quedó bien y mañana digo B y también quedo ¡como un rey!"
Lo triste, para completar este circo, fueron los dos minutos de aplausos que le brindaron "de corazón" los representantes del pueblo, excepto algunos, que son los menos y hacen política ante los suyos, aunque me hubiese gustado saber que hacen en privado, o en los pasillos.
Son 8.43 millones que se gastan en esta "institución" fácilmente reemplazable por un embajador plenipotenciario, o con el mismo ministro de Relaciones Exteriores. En Francia no tienen ningún problema que sea ocasionado por la falta de una monarquía, tampoco los alemanes se sienten huérfanos de su "paternalismo". Pero en España "semos diferentes". Se avecinan grandes recortes, perderemos eficiencia en la Salud Pública, en la educación, aumentará mas el desempleo, habrá recortes en todo lo imaginable, pero nadie intentará pensar, ni siquiera eso, en recortar los gastos de la monarquía. Los aplausos de los representantes del pueblo, ya son un síntoma claro de que por ahí no vienen los "ajustes de cuentas".
El circo esta bien montado, y por bastante tiempo según parece, porque detrás del rey, hay un príncipe y ya se encargará Dios (o la ciencia) de que nazca un principito varón y si todo esto fallara, los palmeros del parlamento ya cambiarían la ley adecuadamente y con rapidez inusitada.