Los republicanos estamos soportando demasiadas frustraciones en la última semana, ver anoche en la entrega de la copa del rey, como el monarca se dejaba abrazar por los "súbditos" Sergio Ramos y Casillas, fue demasiado para nuestro endeble corazón republicano. Ver como el monarca se dio el lujo de bajar al nivel de las masas...je..je..para convencer, una vez mas, a sus seguidores de que sigue siendo campechano y popular, un hombre que siente y se mezcla con las pasiones del populacho, claro que es parte del show y muchos se lo tragan con patatas o sin ellas. Casillas y Sergio Ramos estaban felices de su lacayismo y querían que la España monárquica los tuviera en cuenta y los enmarcara entre sus mas serviles figuras. Pero por mucho show que monten, el pueblo español es cada vez mas anti-monarquico y tarde o temprano se impondrá una III República, porque el rey, por mucho que intente ganarse al pueblo, cada vez se aleja mas, aunque haya "figuras" que lo abracen, tal vez a ellos no les duela que "entre todos" paguemos el bienestar y los lujos de unos individuos que no elegimos para reprensentarnos...
JTA.
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El Borbón se alojó en Abu Dhabi en el Emirate Palace, un Hotel de 7 estrellas a 12.000 euros la noche
El monarca del país de los desahucios, la precariedad, el desempleo, el miedo, la quita de sanidad pública... no tiene crisis. ¿Pagamos todos y todas? Va a ser que sí. Ojalá, al menos, que le incluya el desayuno,
La suite principal del Emirates Palace, el hotel de Abu Dhabi donde se alojó el rey Juan Carlos en su viaje a los Emiratos Árabes, cuesta algo más de 12.000 euros por noche y tiene unos 600 metros, aunque el monarca se alojó en otra suite más normal, por unos 5.000 euros, o incluso en una habitación más modesta, con un coste inferior a los 2.000.
El hotel, uno de los pocos del mundo con siete estrellas, cuenta con unos 1.400 empleados para atender sus 400 habitaciones, los 20 restaurantes, las 128 cocinas y los 102 ascensores. Los clientes distinguidos disponen de un 'mayordomo' las 24 horas del día, que prepara un baño con champán o refresca las sábanas diariamente con esencias de lavanda.
El Emirates Palace dispone de un flota de limusinas a disposición de sus clientes más emblemáticos, y sus restaurantes ofrecen postres aderezados con oro comestible, en delicadas virutas o formando virtuosas figurillas.
Fuente: El Ventano
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