miércoles, 13 de marzo de 2013

¡ Descerabrados y cobardes!

   En estos días se están juzgando a unos cobardes descebrados que atacaron a golpes a un mendigo.¿qué les pasa a estos "valientes"? ¿no resisten la cara triste de la sociedad? estos musculosos y agresivos individuos atacan a las víctimas, pero no tienen el valor de luchar contra los fuertes que generan este tipo de situaciones sociales, muchos sin techo son el producto de medidas que tomaron en su momento importantes banqueros, no en todos los casos, como es fácil de imaginar, pero ya que quieren sacar su rabia, que busquen victimas fuertes y no indefensos. Son cobardes y oportunistas, tienen que sacarse la rabia con el que está a mano, buscar una victima importante, requiere entre otras cosas un trabajo previo y luego correr unos riesgos para los cuales no tienen valor."los hombres de verdad protegen a los débiles", ...¿nadie les enseñó esto?
   Lo más triste es ver lo que expone el abogado defensor de esta plaga social:


Rafael Santamaría, el mendigo de 35 años que fue brutalmente apaleado en 2009 en Madrid cuando dormía en un fotomatón, ha declarado esta mañana en la Audiencia Provincial en el segundo día del proceso en el que se juzga a cinco presuntos neonazis como sus supuestos agresores, uno de ellos en rebeldía. La víctima ha asegurado que no se acuerda "de nada" de lo sucedido aquella noche, solamente que se despertó en el hospital cubierto de sangreLas acusaciones temían que Santamaría no pudiera explicarse, dado que sufre importantes secuelas en forma de alteración cognitiva. El sin techo pasaba la noche del 23 de agosto de 2009 en un fotomatón de la calle Arcipreste de Hita, en la zona de Moncloa. Sobre las tres de la madrugada, los acusados, de estética skinhead, empezaron a propinar golpes a Santamaría, según las conclusiones de la fiscalía. Los golpes le causaron un traumatismo craneoencefálico y una hemorragia que le dejaron en coma. Pasó 541 días en el hospital y hoy por hoy, casi cuatro años después, sufre una minusvalía del 60%. Las lesiones neurológicas le impiden realizar por sí solo cualquier actividad de cierta complejidad.
Pero hay testigos, que también están declarando hoy. Una joven ha señalado que iba con su novio en el coche y que pararon en la calle al ver cómo un grupo de "gente rapada" pegaba a un indigente. Llamaron al 112 para alertar de lo que estaba sucediendo.
Ayer declararon los cuatro acusados. Uno de los acusados, Javier Royo Blasco, miembro del partido ultraderechista Alianza Nacional, inculpó al principal sospechoso, Mykhaylo Tsyku, que se enfrenta a 12 años de prisión, mientras que la fiscalía pide 10 para el resto, además de una indemnización conjunta de 300.000 euros para la víctima. Los demás acusados negaron haber participado en los hechos y también  ser neonazis. El abogado defensor de dos de ellos, Ángel Pelluz, de 90 años, hizo sin embargo un alegato ultra en su escrito de defensa.
“La vagancia no está recogida en nuestra Carta Magna. La ocupación de terreno público por quien no se procura una existencia digna es causa de rechazo en otras personas que cumplen las leyes. La vagancia, el no querer hacer nada, el constituirse en parásito de lo decente, lleva a la repulsión”, señala Pelluz en el escrito.
Preguntado por sus palabras a la salida de la Audiencia Provincial, Pelluz, defensor de Iván Lorente Vázquez y María Leticia García Durán a través del turno de oficio, dijo a la agencia Europa Press: “Yo he visto vecinos apartando cartones y a estas personas, con chinches y piojos, para poder entrar en su casa. Esto no son personas humanas. No han trabajado en su vida. Son cánceres de la sociedad. Yo, si tengo un cáncer, el médico no me pone paños calientes: me lo extirpa. Pues esto es igual”.
El letrado recibió ayer en su casa a este periódico y se ratificó en las declaraciones que había hecho por la mañana. “Mis defendidos no han hecho nada. Solo pasaban por allí”, afirma Pelluz. “Lo que quiero decir es que este caso se explica porque ha habido una provocación previa, la existencia de esa persona en la calle. A nadie nos gusta ir apartando pies descalzos por la Gran Vía. La mierda siempre se ha recogido”, insistió el abogado en su despacho.

Noticia copiada de El País.


No hay comentarios:

Publicar un comentario