Ahora que las empresas lácteas tienen a media población asustada con el cuento del colesterol, no vieran lo mal que me sentí cuando el médico me dijo:
"En la analítica (conjunto de análisis médicos) no le sale nada don José, esta muy bien para su edad".
¿Me creerían si le digo que me sentí mal? algo así como un desplazado social, un paria, un anti-sistema, ¡no es justo coño!...¡no tengo ni colesterol! y eso ya es el colmo en esta sociedad, donde hasta el más pobre tiene alguna enfermedad o todos los números para tenerla, les juro que hubo un momento en que me dieron ganas de decirle al médico ¿A ver? ¿que coño te pasa conmigo? ¿por qué no tengo nada? ¿es que mi cuerpo no vale como para tener algo? ¿qué clase de médico es usted que no me encuentra nada?... pues claro, no es de extrañarse si el fulano este es de la sanidad pública, seguro que en la clínica privada algo me iban a encontrar...¡no te jode! si aún me acuerdo cuando en Argentina pagaba una cuota mensual por tener una privada y siempre me encontraban algo...¡esos eran médicos! y no los del hospital público...
Es que yo no aprendo y como dice el dicho: "al que nace barrigón está demás que lo fajen" y por mucho que me empeñe, sino voy a la privada, seré siempre un tipo tan pobre que no tendré ni colesterol.
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En estos está circulando por el Facebook un video de siete minutos de duración donde se toca la sensibilidad de millones de personas inocentes que aún no se enteran que nada que es gratuito y todo tiene un mensaje oculto, o dos, como este caso. y se los resumo...Una hermosa joven de USA, felizmente casada con un típico hombre disfrutan de un típico amor matrimonial, que hicieron legal con su típica ceremonia en la iglesia, y que disfrutando de una vida feliz ella queda embarazada no porque sexualmente disfrutaban como cochinos vietnamitas sino porque buscaban un hijo producto del amor típico conque nos premia Dios. El caso es que el culebrón no estaría completo si a la bella yanqui no le atacara un cáncer "a lo bestia" que ella y su entorno familiar lleno de amor y rezos logran superar. En este video abundan las fotos, de casamiento con su típico traje de novia, con su marido compungido a su lado en la cama del hospital, y el maldito cáncer que siga haciendo estragos en la pobre mujer, el caso es que la mujer está más pallá que pacá, hasta que lógicamente van a una clínica privada que en el video no se olvidan de que quede bien claro su nombre y en la que la nueva y avanzada tecnología obra el milagro...¡y la fulana se cura totalmente!, pero para que la historieta quede redonda, una enfermera del prestigioso centro privado, le dice a la enferma que eso fue "un milagro de Dios" y como es lógico y típico en ese video no puede estar ausente el marketing al que tanto rédito le sacan los USA, mientras la pobre chica luchaba por su vida, se fabricaron camisetas con la cruz cristiana que los creyentes compraban en apoyo a las plegarias que enviaban al Dios de los norteamericanos que ya sabemos que está siempre con los que rezan pero se preocupa más de los que rezan y consumen. En fin, una publicidad rentable y gratuita para la clínica y para Dios.
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