martes, 7 de mayo de 2013

Un estado debe ser solidario.

   En la Argentina de hoy, como en la misma España, hay muchas personas que se quejan amargamente de las ayudas que otras personas reciben de parte del estado. Para poder discutir este tema primero se debería aclarar que toda persona, sea blanca, negra o colorada, documentado o indocumentado, sea legal o ilegal, contribuye con la riqueza del país donde vive, unos en mayor medida que otros, eso es verdad, pero todos pagan el IVA correspondiente, compren una botella de vino barato o un Ferrari, pero todos en la medida de sus posibilidades consumen y pagan impuestos.
   En Argentina el gran desprestigio y las criticas (entre otras) sobre la presidenta es por las ayudas a los hijos que los argentinos "de bien" reclaman porque dicen que es una ayuda a gente de bajos niveles morales y económicos y que solo sirve para comprar votos. En España se reclama la ayuda a los trabajadores del campo en Andalucía, porque dicen que se pasan más tiempo en el bar que trabajando. Abusadores los hay y en todos los órdenes de la vida, sin distinción de clases sociales, ni otras vainas, es el mismo gobierno el debe controlar eso, en un estado solidario, no se deben tolerar abusos de ningún tipo. Ahora que está de moda copiar a Alemania en casi todo, es bueno que se mire también las ayudas que da el gobierno alemán a las personas que no son tan afortunadas para apañarse en este sistema devorador, y eso que ahora, Alemania ya no es lo que era, ha reducido mucho las ayudas sociales, no obstante esto, aún son mucho más las ayudas que recibe un ciudadano alemán que su par español y ni se pueden comparar los argentinos, porque allá lo que reciben no son ayudas sino que habría que denominarlo "limosnas de estado". Sin embargo en este asunto, y en ambos países, hay otros motivos para generar las críticas, motivos más cercanos a las bajezas humanas, como el odio, el racismo, el clasismo y otros detalles nefastos. Un estado recibe sumas de dinero de tal magnitud que es inimaginable a una mente común. Y entonces surgen las preguntas inevitables ¿de quien es ese dinero? ¿para que utilizarlo? ¿no es acaso del mismo pueblo que lo genera? ¿queremos seguir en aquellos tiempos en que el rey acumulaba grandes fortunas y los pueblos se morían de hambre?. Los estados deben ser solidarios, ¡si son solo administradores del dinero!, o eso deberían ser. Creo que pocas personas no entiendan, a menos que su egoísmo domine su razonamiento, que en el sistema económico en que vivimos, deja millones de victimas en el mundo, personas que por no tener las mismas oportunidades, o por lo que sea, no pueden competir en esta lucha del más fuerte, entonces las soluciones son pocas, o se los tira a los débiles por el barranco como hacían los espartanos, o los estados deben ayudar a que esa gente tenga una vida mejor, al menos con una mínima dignidad.
   En estos días la pregunta del millón que se hacen muchos españoles es ¿para quien gobierna Rajoy? una pregunta lógica si vemos que miles y miles de personas "son echadas a la puta calle" por no pagar la hipoteca o el alquiler, mientras se dan a los bancos sumas tan inmensas que hasta cuesta entenderlas de tantos ceros que traen a la derecha, mientras muchos españoles se espantan al ver que a un joven, se le retira una prótesis de rodilla que apenas cuesta unas monedas. Es lo que hay, lo doloroso es ver como tanto pendejo defiende estados que proponen el "sálvese quien pueda y el resto se jode".

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