Desde hace mucho tiempo Egipto tiene una plaga, mucho peor que la bíblicas y son ni mas ni menos que sus militares. No solo tienen el poder de las armas sino que además son una clase social privilegiada y ayudada por los EEUU, que con solo garantizar el libre funcionamiento del Canal de Suez ya tienen los garbanzos ganados y carta libre para poner o sacar al gobernante de turno. Si es del agrado de los militares cualquier candidato podrá subir al poder y mantenerse en el y todo parecerá MUY DEMOCRÁTICO, si ganan las elecciones candidatos que no les gusta, como fue el caso de Mursi, que además cometió el error de querer hacer limpieza en la cúpula militar, lo derribarán sin miramientos de ninguna índole, total el planeta es propenso a creer todo lo que la prensa occidental diga y siempre se podrá justificar todo. Se podrá decir lo conveniente mucho más cuando en el poder estaban los musulmanes, que ya sabemos que no son como nosotros los católicos que somos casi la excelencia de la raza humana, por lo tanto, a la opinión pública se la domina fácil con cuatro historias ciertas o no. Mientras tanto se matarán impunemente miles de personas, con la mirada complaciente de la UE y USA, aunque se intente cumplir con el paripé y quedar bien con algunas declaraciones muy diplomáticas y poco sentidas. Egipto es un pobre país condenado a menos que alguna vez logren acabar con el poder de los militares, cosa muy díficil por ahora. |
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