De una familia tipicamente española se pueden extraer grandes aprendizajes no solo familiares sino sociales, entonces podemos comprender, por ejemplo, la fuerza que tienen las tradiciones aunque estas sean dañinas y hagan que el individuo desaparezca como tal y sea un componente más del espíritu masificador del clan, que deje de lado su nivel personal, aunque su propio yo no encuentre una razón verdadera para su actuación, es como una hinchada de fútbol que insulta a un jugador rival, sin pensar si lo que hace esta bien...pero como todos lo hacen, ya está justificado. Hace unos días un amigo de raíces gallegas me contó el cabreo monumental que tenía con la mayoría de sus primos que no le hablaban o en el mejor de los casos lo hacían de una manera fría y con carácter casi secreto para que el resto no se enterara.
-¿Qué problema tuviste con ellos?-
-¡Ninguno!- me contestó con determinación.
- ¿Con los padres de ellos?- (ya me imaginaba por donde venían los tiros).
- Hombre tuve una discusión con dos de mis tíos -
- ¿Que casualmente eran hermanos?- le pregunté recordando viejas historias de mi vida.
- Si, ¿como lo adivinó?-
- No... por nada...¡pura casualidad!- le mentí sin pudor.¿y ahora el clan familiar te hace a un lado?-
- Si, ahora como dejé de visitar a mis tíos, mis primos no me hablan y los que lo hacen lo hacen a escondidas como si fuera un delincuente, o un enfermo contagioso-
- No, no eres enfermo ni un delincuente, tal vez sea que tus primos no tienen el valor de despegarse de los padres, no tienen la suficiente independencia de defender sus ideas, y de separar la razón personal de las decisiones del clan, es que eso de "o estas conmigo o estas contra mí" sigue vigente.-
- ¡No los entiendo! yo no les hice ningún daño a mis primos y los quiero, es más con el único que había tenido una pelea juvenil, allá por los veintitantos años, estuvo en mi casa de visita cuando teníamos como cuarenta, cenamos una carne asada que yo cociné, lo pasamos muy bien con nuestras respectivas parejas, nos abrazamos y nunca más...le escribí un par de veces y nunca me contestó, ¡como si me hubiera muerto!, esto se repitió con el resto de mis primos, bueno...no debo ser injusto, uno de ellos si me escribe y mantenemos una correspondencia fluida y agradable.-
- ¡Ese es él que vale!... te considera "no culpable de nada" a nivel personal, el resto aunque no les hayas hecho daño, responden al clan, que seguramente les contaron tus desatinos y la osadía de ponerte a discutir con "los mayores"...obediencia debida que le dicen...yo que tú no me preocuparía más.-
- ¡Pero no es justo! ¿o sea que yo debería callar mis razones para ser bien visto y querido?-
- Así es mi niño...estamos en España y en España el caciquismo comienza en la familia-
- ¿Aunque dos de mis tíos sean dos hijos de puta?-
- Esas cosas no se dicen...¡no le faltes el respeto a la gente mayor! je...je...-
- Pues me importa un coño que no se digan, yo lo digo igual-
-¿Sin tíos y sin primos?...je..je..-
- No me preocupa, si tengo razón...¡a tomar por culo con todos mis primos, tíos suegras y cuñaos!-
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