viernes, 21 de agosto de 2015

Una cosa es la prostitución y otra la explotación.


Algo tan claro como trabajar dignamente con salarios y derechos justos, a ser un trabajador explotado, en cualquier otro ámbito laboral se aplica esta simple y rotunda diferencia.
Son conceptos que no se deben mezclar y en España los puritanos de la moral, lo utilizan para confundir.
Hace unos días Amnistía Internacional se declaró partidaria de legalizar la prostitución, pero no de permitir la trata, ni la explotación sexual de niños/as, ni de mujeres necesitadas que vienen a España creyendo que han encontrado un trabajo legal y son secuestradas por mafiosos.
Por mucho que se intente engañar a la gente, no deben dejarse engañar.
La prostitución es un trabajo para quien quiera ejercerla libremente, no tenemos ni derecho ni moral suficiente para juzgarlo. En una sociedad basada en la hipocresía mas bien deberíamos preguntarnos el porque se llega a la prostitución y porque hay tanta demanda de ella por parte de los hombres desde siempre. Deberíamos sincerarnos y preguntarnos ¿porque se fijó como norma moral el que las mujeres fueran "virtuosas"?, ¿por que se valorizó la virginidad antes del matrimonio? ¿por que se privó a las mujeres del derecho a ejercer sus necesidades sexuales? ¿por que se permitió que una mujer virgen se comercializara (y se comercialice aún hoy) para el matrimonio como si fuera un auto cero kilómetro? ¿por que los hombres se adueñan de la moral y el cuerpo de las mujeres desde hace miles de años? ¿por que las madres colaboran con el machismo tan calladamente sabiendo que son las mas importantes en la educación de sus hijos?.
Estas y muchas otras preguntas están sin una respuesta franca y libre de "mentiras legales" entre los que tienen una importancia destacada, las religiones, todas ellas. No debemos olvidarnos que hasta no hace mucho tiempo para entrar en una iglesia católica las mujeres debían cubrir sus "impurezas" provocativas y se cubrían la cabeza con una mantilla para tapar la pecadora cabellera.
Amnistía Internacional trabaja y mucho por un mundo mejor, pero como dice su lema "EL MUNDO PUEDE CAMBIAR, PERO NO LO SOLO".
Creo que ya va siendo tiempo de dar un paso adelante y todos debemos dejar de lado, ataduras morales que de moralidad tienen poco.
No debe haber en el mundo ningún niño/a explotado trabajando en minas o plantaciones durante doce horas diarias, ni jóvenes esclavizadas cosiendo ropa, por unos centavos de euro al día, y durmiendo en habitaciones hacinadas. Eso es amoral, al igual que la esclavitud sexual. pero si alguien decide ser prostituto/a deben tener los mismos derechos laborales que otro trabajador. See miente mucho con este tema y se oculta mucho más.
¿Sabía que aumentó el número de mujeres que se prostituyeron por falta de otro tipo de trabajo? Eso, no lo cuentan los mismos medios que se oponen a la legalización.
José Trillo Arán.

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