Yo imagino que la paciencia de los jueces debe ser infinita, de lo contrario en lugar del clásco martillito de madera debería tenen una maza de hierro de al menos quince kilos, sin contar el peso del mango, pues escuchar lo que deben escuchar y no reaccionar debe ser una prueba muy dura.
El presidente de la Caja de Insular de Ahorros de Canarias, Juan Manuel Suarez del Toro, no tuvo empacho en declarar que el firmaba lo que otros le decían, que lo suyo era cobrar las dietas y no se enteraba de nada, así fue como firmo un balance de Bankia donde constaba una ganancia anual de 309 millones de euros, cuando en realidad el banco había perdido nada menos que 2979 millones...¡nada! una minucia...
El fulano viajaba a Madrid con sus gastos pagos a cuenta de todos y firmaba, sin saber, "lo que me decían" dijo el tonto este, o será que de tonto no tiene un pelo y le quedará mejor lo de corrupto, o supuesto corrupto, hasta el juez lo diga, pues no debe ser muy tonto si además es el presidente del la Cruz Roja...¡vaya por Dios! ¡que hay tener paciencia en este país!
En Canarias estamos de parabienes, estamos quedando muy bien ante el resto de los españoles........Soria como ministro y este fulano de presidente de la Caja de Canarias...después del plátano exportamos pro hombres...¡joder chacho....!
Lo bueno para los canarios es que "corrupción de muchos salud de canarios", porque hasta donde yo sé el mal de muchos corruptos se extiende a lo largo y al ancho de nuestra geografía.
Los españoles tienen paciencia de jueces, lo que ven y lo escuchan no tiene límites, pero, tengo miedo que un día de estos, revienten de tanta burla y cojan el mazo y empiecen a dar y dar y dar y no quede nada en pie y lo malo que cuando uno revolea el mazo pierde un poco el control de su dirección y de pronto puede caer en cabezas no previstas ya que cuando un entra a repartir tambien suele perder el dominio y la dirección, la paciencia tiene un límite y no vaya a ser que suceda, que ya ha pasado...
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