El gobierno de USA encargó un estudio sobre el futuro de la situación mundial en un período de un mínimo de veinte años, las conclusiones no son nada extraordinarias, hacen una aproximación de la posible cantidad de habitantes en el mundo, el crecimiento desmesurado de las grandes ciudades, el aumento del hambre, el crecimiento comercial de China que pasará a ser el mayor poder económico del mundo y poco más. Y digo nada extraordinario porque no hace falta ser un experto para llegar a algunas de estas previsiones a futuro. Que las ciudades se convertirán en inmensos infiernos lo vengo diciendo yo desde hace tiempo en este blog y en el anterior, en múltiples artículos vengo llamando la atención sobre un asunto que parece ser que a nadie preocupa, y es la matanza, así con todas las letras MATANZA de campesinos, generalmente me referí a latino-américa, pero también sucede en África y Asía. Y cuando digo matanza no solo me refiero a la quita de la vida de modo violento, también se mata destinando a las personas a ghetos de los alrededores de las grandes ciudades, restándoles poder de sobrevivencia al quitarlos de su entorno donde si están capacitados para vivir dignamente. En un futuro no muy lejano la gente vivirá en grandes ciudades y los campos cultivables serán todos de grandes multinacionales de la alimentación que no generan trabajo ya que están muy automatizadas y sacan provecho a las altas tecnologías, no generan puestos de trabajo pero si destierran a miles de campesinos. Se dice que en el Paraguay el 1% son los dueños de la tierra de ese país, no sé si esa cifra es correcta, y poco importa que sea el 1% o el 2% o incluso el 20%, lo mismo producirá marginalidad y hambre.
Hace unos días escribí que soñaba con un país que haga una reforma agraria, de verdad, y un amigo se reía de mi mientras me decía que era un comunista pasado de moda, tal vez lo sea y seguro que yo no veré esa gran revolución que algún día sucederá, porque es lógico que suceda, el hambre se encargará de que suceda.
Hace ya un tiempo leí que los países árabes que basan su economía en el petroleo están comprando grandes extensiones de tierra cultivable y con abundante reservas de agua, y esto no es nada nuevo aunque muchas personas no lo sepan, ya Japón en el año 1980 alquilaba grandes extensiones de tierra en la Argentina y yo mismo fui testigo al conocer en la provincia de Catamarca una empresa que con toda la tecnología exportaba al mismo Japón vía Chile y por supuesto contando con la corrupción de ambos países, no pagaban impuestos, solo la famosa "coima" o soborno a las autoridades. Lo que convertía a ese lugar en una finca alquilada por monedas y generadora de grandes riquezas, en esa finca no había sino cuatro empleados locales, del resto del trabajo se encargan los ordenadores que median la humedad del suelo y activaban el regadío automático de acuerdo a la necesidad, todo era de última generación.
Mi sueño de una reforma agraria y un manejo cooperativo y equitativo de esos recursos, llegará, sin duda, por ahora, cuando me vence la desesperanza, pienso en el pequeño ejemplo de Marinaleda, en Andalucía.
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