lunes, 4 de agosto de 2014

Las mentiras de las estadisticas.

   Es sabido que en España hay dos problemas muy preocupantes, uno es el paro y el otro la corrupción, en esto concidimos la mayoría de los ciudadanos, por lo tanto el gobierno, sabedor de esto, intenta minimizar o desvirtuar los datos y la percepción de la ciudadanía. En el problema del paro nos destacan a través de los medios afines los nuevos logros, se destaca la creación de nuevos empleos y se oculta la calidad de ellos, y el hecho cierto de que hace años se vienen perdiendo puestos de trabajo de cuarenta horas semanales, con sueldos que permitían vivir, mas o menos dignamente a una familia tipo, de esto no se habla. Se resalta que los empresarios contratan nuevos trabajadores y que baja el paro, lo que no se dice que hay menos horas laborales, o sea que el mismo empleador que tenía contratado a un trabajador por 40 horas semanales, lo reemplazó por dos que trabajan menos horas, con contratos precarios, que el anterior con contrato fijo. Por lo tanto se aumentó en un empleado más la lista de trabajadores. Las cifras del paro bajan, pero aumenta la precariedad laboral y uno se encuentra conque "una persona trabajando, vive en la pobreza". Otro dato que se evita dar es que ya hay 2.600.000 personas que no cobran ningún tipo de remuneración ya sea por derechos agotados o por ayudas sociales.
Se intenta dar por parte del gobierno una idea de que todo mejora, a mi criterio no lo hacen solo por levantar el optimismo que es una base importantísima para remontar, sino por el interés político que los mueve y que esperan ver reflejado en las próximas elecciones.
   Hace unos días tuve la visita de un primo que vive en Argentina, y en mi afán de quedar bien le mostré las bellezas del lugar, lo bien que vivimos, los hermosos paisajes, de todo tipo, que rodean mi vida, en fin, lo que todos hacemos cuando queremos que los que nos visitan se lleven la mejor impresión posible, y sin quererlo pensé que estaba haciendo lo que hace el gobierno, evitar que mi primo viera los barrios pobres, las colas en Cáritas o el aumento de la inseguridad, y logré que se fuera con una buena imagen de este rincón de España. El gobierno evita que datos importantes no se sepan, como por ejemplo que mas de 1.300.000 personas no figuran en el paro, porque rondando los cincuenta años de edad ya no tienen ninguna esperanza de encontrar un trabajo.
Por otro lado nos quieren mentalizar de que todo va mejorando y se nos muestran cifras y datos que no tienen nada que ver con la vida del pueblo, como que la macroeconomía va bien y que ya llegará a las clases trabajadoras, pero una cosa es que los datos estén ordenados y otra es que vayan bien, España está endeudada por muchos años y la deuda nos seguirá llevando a recortes sociales, porque no debemos olvidar que se garantizó pagar las deudas a costa de cualquier sacrificio, porque si no hay crecimiento, las deudas se pagan con recortes y esto es sinónimo de decadencia social. Rajoy evita reconocer que no tiene ni idea de como crear empleo, porque el aumento de este es la única salida que nos queda para mejorar la situación y evitar por ejemplo que sigamos cayendo en la pobreza y que se aumente el consumo a través de la calidad del empleo y la cuantía que se obtiene de él, porque con contratos temporales y sueldos penosos, nadie podrá encauzar un futuro con ilusión ni colaborar con el consumo, que es la base de esta sociedad en que nos toca vivir.
El gobierno nos trata de mostrar lo bonito del paisaje, como hice yo, con mi primo, pero aunque todos seamos turistas de paso en la historia de España, nuestra estadía, es mucho más prolongada y merecemos lo mejor.

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