¡ UN ORGULLO ESPAÑOL!

A menudo solemos quejarnos, a veces con razón y otras por quejarnos ¡nomas!...a simplemente por joder! o por quejicas, un papel que mucha gente adopta para cualquier aspecto de la vida y siguen aquello de que "el que no llora no mama" y así llorando por aquí y quejándose por acá...¡van mamando! ya que siempre encontraran un solidario a mano, o una gilipollas que los aguante o los ayude. "habemus de todo"...
   Con España pasa lo mismo, somos muchos los que nos quejamos, pataleamos o insultamos a placer, por hábito o por defender lo que creemos que se debe.
   En mi caso me "emberrincho" porque creo que se han logrado maravillas que muchos países del mundo no alcanzaron y sino nos envidian más es porque aún no se enteraron del todo del nivel que se alcanzó, por ejemplo, en Sanidad o en una cosa más sencilla como es el comportamiento cívico.
   Cuando regresé al país a fines del 2001, después de pasarme la mayoría de mi vida en Latinoamérica, me lleve pequeñas grandes sorpresas que hacen la vida mejor, pequeñas cosas que elevan la convivencia y hacen un país mejor. Y como es mi costumbre daré solo algunos ejemplos sueltos, para que los lectores agreguen los suyos o pongan a funcionar la imaginación.
   El primer impacto fue poder cruzar una calle por un paso de cebra ¡sin semáforo! y comprobar como se detenían autos, camiones inmensos, autobuses y hasta motos, en cualquier lugar de su geografía, sea una calle de ciudad o una carretera, la prioridad al peatón es ejemplar y aunque hiera los sentimientos de muchos sudamericanos, eso allá no se ve, si alguien intenta cruzar un paso peatonal, con semáforo o sin él, debe tener mucho cuidado sino quiere terminar espaturrado o dando vueltas por el aire.
   Otro detalle que me llamó la atención fue ver a jóvenes quinceañeros y/o en edades aproximadas donde la rebeldía es lo normal, caminar unos metros para echar un papel o una lata en una papelera, o ver que en una población de más de cuarenta mil personas que es un suburbio de la capital de la isla, el panadero dejaba la bolsa del pan colgado en la puerta de la casa de su cliente, y ahí podía estar durante horas, otro detalle nuevo para mí, fue ver que cuando alguien perdía un saquito o un pullover o una rebeca, o un sombrero o una gorra, la gente lo colgaba en lugar visible y ahí permanecía hasta que volvía el dueño o se lo llevaba alguien después de varias horas cuando se entendía que ya no lo buscaban, o ver en la puerta de los negocios como los clientes dejan el paraguas en un recipiente, entran al comercio, y al salir, ¡los paraguas están ahí!, son detalles que hablan muy bien de su gente.
   Pero eso era nada a comparación de la Sanidad que se gozaba en España, recuerdo que me llamó mucho la atención ver como puntualmente el Servicio Canario de Salud enviaba a sus chicas/os a visitar a doña María todos los días, la atendían, la higienizaban, la escuchaban, estaban atentos a que cumpliera con su medicación...¡y conque calidad humana!, yo mismo tuve en los últimos doce años que soportar dos pequeñas intervenciones quirúrgicas, nada importante en el plano de la salud, sin embargo si lo fue en el plano personal, la atención en el hospital Doctor Negrín, fue digna de un VIP, no creo que al rey lo atiendan mejor de lo que me atendieron a mí y todo sin poner ni euro..¡ni uno! (es que ya lo había puesto al pagar los impuestos), así debería ser, si el dinero de las personas que pagan impuestos cuando pueden trabajar, la solidaridad del sistema de responder cuando la persona no puede contribuir con su trabajo, aunque solo sea por un par de días, como fue mi caso. Sería un articulo muy largo escribir sobre esto, pero les voy a contar una simpleza que demuestra el trato, una enfermera me preguntaba ¿como esta mi mudito? es que no podía hablar porque me habían operado de las cuerdas vocales, la alegría y la gracia de esa mujer, sobrepasaba lo estrictamente profesional, debido a mi edad y al trato de respeto se debía dirigir a mi como "Don..." sin embargo siempre tenía un toque de amistad..."así deberían ser todos los hombres ....mudos...como usted", pero no crean que era solo ella, desde la recepcionista de la entrada hasta el más prestigioso médico, brindan un trato exquisito. La Sanidad española, es un logro espectacular y sino me fallan los informes, no tiene igual a nivel mundial.
   Por lo tanto hay que enojarse, cabrearse, insultar, tirar piedras, hacer paros, tumbar gobiernos si es necesario, pero los logros conseguidos no se pueden perder. Quien escribe no es anti español por escribir y abroncarse cuando cree que el gobierno está recortando derechos, ni es menos español, muy por el contrario, es más español que muchos que se jactan de ello.

Nota: En este caso me refiero a Canarias, pero mis familiares que viven en otras comunidades, opinan igual e incluso me proporcionaron otros datos que serían para escribir un libro y no en la reducida extensión de un articulo.