jueves, 8 de mayo de 2014

Europa y su falta de memoria.

Mucha gente en Europa, demasiada, es básicamente conservadora, hipócrita y cobarde y aunque le suene un poco fuerte, se lo iré desgranando para que sepa porque lo escribo así tan claro.
Es conservadora porque en el mas profundo pensamiento no quiere que nada cambie, los europeos saben que en comparación con gran parte de la humanidad, están muy bien y dan una imagen de buenos humanos que en realidad no son y se llenan la boca hablando de derechos humanos que en realidad no quieren que se cumplan. Niegan a ciudadanos de países pobres la posibilidad de venír legalmente, pero tampoco los quieren ilegales, por lo tanto niegan un derecho humano fundamental, se encierran en sus fronteras y guardan bajo llave un poco de pan para no tener que compartirlo, lo que demuestra que además tienen poca memoria y en unas décadas se les olvidó que muchos millones de personas huyeron del hambre y las guerras y encontraron cobijo en países del "tercer mundo". Esta Europa gorda "por la buena comida y la poca vergüenza", como decía mi abuela, niega el pan, mientras se tira comida, a ciudadanos que están soportando hambre y guerras que los mismos europeos ayudan a generar y mantener. La bajeza moral, la ignorancia y la cobardía de millones de europeos es imperdonable, ven un negro o un asiático por la calle y lo miran de reojo como si fuera una reencarnación del diablo que les viene a robar el sustento, tal vez porque saben que ellos fueron y van a robar a otras tierras, pues "el ladrón piensa que todos son de su condición". Da pena ver como los políticos sin escrúpulos incentivan la xenofobia y el racismo y los limitados de neuronas los siguen. Da pena ver como aún en estos años de tantos avances científicos no entiendan que una piel negra es una adaptación humana a la luz del sol, da penita ver como gente que se autoproclama creyente de Dios no quiera entender que nos dio millones de flores de formas, colores y aromas de una incalculable variedad para que sigamos sorprendiéndonos, cada día, ante tanto surtido de belleza y exclusividad. Da pena ver como un continente que sufrió el dolor de las mas miserables situaciones humanas, se sigue encerrando en sus miedos y su avaricia. Da pena ver como en este tiempo aun se escuchan desde muchos púlpitos mensajes que desprecian a las mujeres y llaman a regresar a tiempos pasados donde la igualdad ni se planteaba como una opción. Da mucho mas que pena presenciar como una supuesta Unión Europea se desangra en viejos odios entre los mismos países que la compone y reviven sus pleitos y amasan la idea del dominio económico, que es una nueva forma de guerra. Europa no quiere gente "extraña", se encierra, se enquista en sus bajezas, tal vez con la vieja idea que caló tan profundo durante tantos años, esa engañosa creencia de que son superiores, la misma que les dio una razón moral para invadir pueblos e imponer a sangre y fuego y acabar con otras culturas y muchos millones de personas. Y usted pensará que son pecados del pasado, pues no, los siguen fomentando hoy en día. Da pena...mucha pena.

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