Hoy e visto llorar a una abuela.

   Me llamó la atención el ¡no puede ser! que dijo la farmacéutica al mirar el ordenador...
- "señora lo lamento su medicamento lo sacaron de la lista"-
-¿Como que lo sacaron?... ¿Quiere decir que tengo que abonarlo?- preguntó la señora con la voz temblorosa y los ojos grandes.
-Pues si señora...- y se le noto que lo decía con sentimiento, porque los farmacéuticos, conocen a la gente y sus problemas.
   Yo las observaba a ambas, a la espera de que se termine el penoso silencio que se hizo, un silencio triste y tenso, mientras confirmaba que esa abuela era del barrio, recordé a verla visto en el supermercado.
-¿Cuanto cuesta? preguntó la mujer mientras buscaba en la bolsa de las compras el monedero.
.La farmaceutica miró el ordenador y dijo:
-31 euros...señora-
La abuela levantó la cabeza y se le notó que tenía ganas de decir algo, pero optó por no hacerlo.
-31 euros...31 euros...¡que caro!- dijo mientras ponía sobre el mostrador un billete de veinte euros y un montón de monedas.
- No sé si me alcanza...a ver...27...28..29...no, no me alcanza...es que traía el dinero de las compras y..." ya apenas podía mantener la voz firme, estaba a punto de llorar y se notaba.
- No se preocupe señora llévelo igual y otro día me lo paga.-
- No ¿como va a ser eso? yo no se si después...-
   Con disimulo la observé, dos lagrimas estaban a punto de caer de esos ojos cansados. La abuela buscaba algo en el fondo de la bolsa, algo que no iba a encontrar.
-¡Hay este resfrió!-dijo mirándome.
-Si así estamos todos, ya de tanto lagrimear ni vemos, es lo que tiene esta época, muchas alergias y cosas de esas.- le dije para darle pie a su pretexto.
   Hice mi compra en la farmacia y volví a casa caminando, adelante iba la abuela con su bolsa y su andar encorvado hacia un lado, opté por caminar despacio y sacarme la duda que la situación me había creado, a unos metros más adelante estaba el supermercado, la señora no se detuvo, siguió a su casa con la bolsa vacía.
   ¡Hijos de puta! lo pensé sin darme cuenta que lo decía en voz alta.
Y me fui cabreado, pensando mil cosas, preguntándoles a nuestros gobernantes si un país se arregla con el ahorro de medicamentos, que si no les da vergüenza faltar a un contrato de tanto años, que como le van a cobrar dos veces a personas que ya no tienen oportunidad de ganar dinero, que colaboraron con la riqueza del país y pagar por adelantado durante muchos años.
   ¡Que les va a dar vergüenza a estos hijos de puta!.
   Y disculpen que escriba palabras feas, pero es que ver llorar a una anciana duele, duele mucho, porque no es justo, duele mucho porque pienso en soluciones muy feas, que no serían una solución sino una venganza.
   Horas después me siento a escribir esto y mientras pienso que decir, miro el árbol de la acera de enfrente y veo una soga corrediza y un político colgando y se que esta no sería la solución...¡por qué no me alcanzarían los arboles!, tendré que buscar otra método más acertado, además con la violencia no se soluciona nada, la violencia es como los anti-gripales, no curan la gripe...pero...¡como alivian!

"Un país que abandona a sus viejos y no invierte en los niños, ni respeta su pasado ni tiene futuro"